En Madrid no solo se recorren los lugares más emblemáticos y turísticos para ver su atractivo, también encontramos el atractivo en los sabores inconfundibles que representan la Capital. Sin duda, para los amantes de la comida, la gastronomía madrileña es un festín que entiende de mucho sabor.
En este artículo te contamos cómo Madrid ha pasado de lo castizo a lo contemporáneo… y lo ha hecho de la forma más deliciosa.
Sabores castizos que no pasan de moda
La cocina tradicional madrileña es pura historia. Recetas heredadas de abuelas, con más de un siglo de historia.
- Cocido madrileño: Garbanzos, carnes, verduras… y una sopa que resucita a cualquiera. ¿Dónde probarlo? La Bola, Malacatín, Taberna La Daniela.
- Callos a la madrileña: O te encantan, o los odias, no hay punto medio, pero seguramente la primera opción. ¿Dónde probarlo? Casa Alberto o en San Mamés.
- Bocata de calamares: Sencillo y efectivo. Pan, calamares fritos y a disfrutar.
¿Dónde probarlo? Bar La Campana, El Brillante o en la famosa Puerta del Sol. - Postres con historia: Rosquillas del Santo, churros con chocolate, bartolillos… Una tradición de lo más dulce. ¿Dónde probarlo? Chocolatería San Ginés.
Por otro lado, las tabernas son parte del ADN madrileño. No solo se come bien, también se charla, se ríe y se bebe. Pide una cerveza bien tirada, acompáñala con ensaladilla rusa, torreznos o unos huevos rotos y deja que el bullicio de esta gran ciudad te envuelva. La experiencia es tan importante como el plato. Te recomendamos Bodega de la Ardosa (Malasaña), Casa Labra (al lado de Sol), Casa Revuelta.
Madrid también ha transformado sus mercados tradicionales en auténticos centros de experiencias culinarias.
- Mercado de San Miguel: un clásico turístico con propuestas de los mejores chefs.
- Mercado de San Antón (Chueca): tapeo moderno y terraza con vistas que disfrutar al sol.
- Platea Madrid: un espacio escénico donde comer es un espectáculo.
Son perfectos para probar muchas cosas en un mismo lugar.

Madrid no olvida sus raíces, pero tampoco teme innovar. Esto es lo que hace que su cocina sea tan rica, viva y tan diversa. Siempre tendrás algo nuevo que probar.